La producción de cereales podría situarse en 18,6 millones de toneladas en 2025 en España, según un primer avance realizado por los comerciantes europeos de grano (COCERAL). Esa cifra supondría un descenso del 12% respecto a los 21,2 millones obtenidos en la cosecha anterior y se debería a una caída de los rendimientos medios, que no se vería compensada con el incremento estimado en la superficie dedicada a estos cultivos.

 

En todo caso, las cifras de los comerciantes europeos de cereales son muy preliminares y están sujetas a revisión a medida que avancen las siembras y posteriormente el desarrollo de los cultivos. Por otro lado, la estimación de cosecha que maneja COCERAL para España en 2024 es superior a la del Ministerio de Agricultura (19,8 millones de toneladas), por lo que la previsión para 2025 de los comerciantes, de confirmarse, sería en torno a un 6% más corta que la del presente año. El descenso se repartiría entre todos los tipos de grano, salvo en maíz, cuya producción aumentaría.

 

En lo que respecta a la Unión Europea, COCERAL apunta a un volumen cercano a los 275 millones de toneladas, que supondrían un aumento del 6% respecto a 2024, favorecido tanto por una mejora de los rendimientos medios como por un ligero aumento de la superficie sembrada. El incremento se deberá principalmente al aumento de la producción de trigo blando. Entre los grandes países productores de la UE, Francia podría alcanzar los 61,2 millones de toneladas, recuperándose de la corta cosecha de 2024 (53,5 millones); también se espera un aumento en Alemania (41,6 millones frente a 39,1) y en Rumanía (22,3 millones para 2025 frente a 20,8 en 2024) mientras que la producción de Polonia se mantendría estable en 35 millones de toneladas.

 

Fuera de la UE, el Reino Unido mejorará sus cifras y podría llegar a 22,9 millones de toneladas (19,5 millones en 2024), al igual que Ucrania, donde los comerciantes prevén un volumen de 56,8 millones (frente a 52,7 millones en 2024).