La Unión Europea se reserva el derecho de adoptar medidas contra Estados Unidos si este país no cumple con los dictámenes, en su contra, de la Organización Mundial del Comercio (OMC) en la disputa sobre las aceitunas españolas.

Sin embargo, de momento, parece que la vía que se abre, tras el segundo fallo de la organización contra Estados Unidos el pasado mes de febrero, es la vía diplomática.

En ese segundo fallo se considera que la reducción de aranceles aplicada por Estados Unidos a las importaciones de aceitunas negras españolas no cumplen con la sentencia inicial, que determinó que los aranceles adicionales son ilegales.

Esta semana ha habido una reunión del Órgano de Solución de Diferencias de la organización en la que Estados Unidos señaló su decepción con ese fallo, pero lo aceptó y manifestó su deseo de trabajar con la UE para resolver esta disputa.

La asociación que agrupa a los exportadores españoles de aceituna de mesa, ASEMESA, ha mostrado su desconfianza. Ha recordado que Estados Unidos ya aceptó el fallo inicial y mostró la mejor voluntad de aplicarlo pero al final se limitó a reducir ligeramente el arancel. Por ello, espera que el Gobierno de España y la Unión Europea exijan a Estados Unidos que dé pasos inmediatos para acabar con una situación manifiestamente injusta y contraria a los principios de la OMC.