Nueve organizaciones que representan a los jóvenes europeos en los sectores de la agricultura, la alimentación, las zonas rurales y el medio ambiente (CEJA, Vía Campesina, Slow Food, Amigos de la Tierra…) han difundido una declaración conjunta en la que piden que su voz se tenga más en cuenta en el proceso de elaboración de las políticas europeas.

 

Recuerdan que la agricultura de la UE está envejeciendo y que el relevo generacional plantea grandes retos: “el agricultor medio en Europa tiene 57 años y sólo el 6,5% de los agricultores tenían menos de 35 años en 2020. Al mismo tiempo, Europa pierde 1.000 explotaciones cada día”. “Los jóvenes agricultores y emprendedores se enfrentan a numerosos desafíos a lo largo de su trayectoria, como el acceso a la tierra y la falta de recursos financieros y técnicos y de oportunidades de desarrollo profesional, además de los retos generales de la agricultura, como una remuneración justa y unas condiciones de trabajo dignas”.

 

La declaración añade que, “para seguir desarrollando el sector de la alimentación y la agricultura, es esencial atraer y apoyar a las generaciones más jóvenes y garantizar la representación de sus perspectivas en la formulación de políticas. Por ello, potenciar la voz de los jóvenes mediante su inclusión significativa, participativa y a largo plazo (que puede facilitarse mediante apoyo financiero) en el proceso de formulación de políticas es vital para garantizar la sostenibilidad a largo plazo del sector”.

 

En diciembre tuvo lugar un primer debate con el comisario de Agricultura, Christophe Hansen. Las nueve asociaciones esperan que se institucionalicen estas reuniones. La cuestión de la instalación y el relevo generacional en la agricultura es una de las prioridades de Hansen, que debe desvelar su Visión de la Agricultura y la Alimentación en febrero.